Sistema de secado por infrarrojos Rápidos, económicos y rentables. El control definitivo de la definición de las reparaciones. Infrarrojos: fijos y móviles. El futuro empieza hoy pensando en el mañana. Disponer de las últimas tecnologías en sistemas de secado significa garantizar y estandarizar la calidad del repintado reduciendo costes en tiempo y consumo respecto a los hornos de secado mientras se consiguen mejores acabados. Característica principal de los rayos infrarrojos Es importante saber que el rayo infrarrojo penetra por el producto a secar, calentando inmediatamente el apoyo. De este forma se realiza la evaporación de los solventes que se encuentran en los estratos internos hasta los externos. Partiendo de esta característica en el momento de llevar a cabo el trabajo, se puede decidir que tipo de aplicación usar. Primera aplicación: la lámpara se puede usar como secador drástico de producto. Segunda aplicación: Complemento para facilitar y ayudar a la evaporación de los solventes. Rápidos, económicos y rentables. El control definitivo de la definición de las reparaciones. Infrarrojos: fijos y móviles. El futuro empieza hoy pensando en el mañana. Disponer de las últimas tecnologías en sistemas de secado significa garantizar y estandarizar la calidad del repintado reduciendo costes en tiempo y consumo respecto a los hornos de secado mientras se consiguen mejores acabados. Tiempo de secado - Estuco: 10 min. - Fondo: 15 min. - Esmalte: 15 min. Distancias Es importante respetar que no baje más de los 45 cm. del apoyo a secar. - Estuco: 60 cm. - Fondo: 60-75 cm. - Pintura: 65-75 cm. - Mojado sobre mojado: 50 cm. En caso de dudas es preferible guardar más distancia de la aconsejada y compensar con algunos minutos de aplicaciones adicionales. La propagación del calor: La transmisión del calor se produce mediante tres fenómenos físicos, la CONDUCCION, la CONVECCION y la RADIACION. La CONDUCCION consiste en la transmisión de calor entre dos cuerpos por contacto físico de éstos. En la CONVECCION, el calor se propaga de un cuerpo a otro mediante el calentamiento molecular del fluido que los separa. En el caso de la RADIACION, no existe contacto entre los cuerpos. El calor se transmite mediante ondas. La Tierra recibe el calor del Sol mediante radiación. Existen cuerpos que absorben toda la radiación por el simple hecho de incidir las ondas sobre el cuerpo humano. Otras la reflejan, como las superficies metálicas pulidas, cristales, etc. Está ampliamente demostrada la superioridad del sistema de radiación y más concretamente la realizada a baja temperatura. Como cualquier elemento caliente, el cuerpo humano emite radiación, siendo su temperatura normal la de 35 a 36ºC. Para conservarla cede calor al ambiente que le rodea. Estas perdidas se producen por: Por radiación hacia los elementos más fríos (paredes, cristales, etc.) 60% Por convección con el aire ambiente, el 30% Por evaporación (respiración y transpiración) 10% Es en consecuencia más importante la temperatura de los paramentos de la habitación que la del aire ambiente que la contiene. En experiencias realizadas se ha demostrado que las condiciones de confort de los individuos mejora substancialmente con las condiciones de temperatura del aire a 0ºC y paredes a 28ºC que con aire a 28ºC y paredes a 0ºC. AERPLUS viene desde hace años proyectando e instalando los sistemas calefactores radiantes, integrados en el suelo o en el techo, los cuales aprovechan todas las ventajas de la radiación calorífica entre cuerpos. El funcionamiento de estos sistemas de calefacción es muy sencillo. En el momento en que la totalidad de la superficie se convierte en una superficie radiante a moderada temperatura, la energía calorífica se difunde instantáneamente por todo el local. Parte de esta energía será captada por las paredes y objetos fríos, los cuales se irán calentando. Otra parte será reflejada precisamente por estos mismos objetos y paredes en todas las direcciones y a todos los niveles. Al mismo tiempo, el aire ambiental, que no absorbe radiación alguna, se calienta poco a poco por contacto, originándose así una ligerísima corriente de convección la cual genera una temperatura constante homogénea. La sensación de calor es idéntica en todos los puntos del volumen de la estancia consiguiéndose así que el equilibrio térmico de calor emitido por el cuerpo hacia su alrededor sea perfecto.